Esta actividad parte de la hibridación entre creación artística, pedagogía y sensibilización ambiental, y pretende generar una reflexión compartida sobre la importancia de la diversidad, tanto en los ecosistemas naturales, como en el campo del pensamiento. Representa una invitación a construir un “banco de semillas” creativas de las que puede crecer todo lo que podamos imaginar. Se trata de semillas diferentes que germinan en un territorio simbólico: pueden contener actitudes, ideas, recuerdos o reivindicaciones y generar plantas híbridas, divertidas y/o revolucionarias, que a su vez pueden producir frutos nunca antes vistos. El ejercicio propone un acercamiento lúdico e interdisciplinar a temáticas complejas como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la transición ecosocial, entre otras. Mediante dinámicas de reflexión y creación colectivas el recurso propone una acción seminal que puede replicarse en infinitas variaciones y adaptarse a distintos contextos o a la colaboración con diferentes agentes sociales.